La compañía de teatro con sede en París presenta una narración feminista de la comedia de Shakespeare, La fierecilla domada.
El cliente deseaba un conjunto cohesivo de íconos que narraran colectivamente la profunda historia de control coercitivo, relaciones abusivas, misoginia y, en última instancia, la recuperación triunfal del poder en una estética vibrante y lúdica.