Encargado por Erin McDonald de la agencia Northampton Arts Management Trust, el informe recibido por Caroline provocó la creación de una apariencia divertida con una huella moderna al estilo Hogarth, que ilustra las baladas de amor de las mujeres que vivían en la Inglaterra del siglo XVIII en Gin Lane. El resultado es una divertida ilustración, con un tono subversivo y hasta sombrío al estilo clásico, pero que traduce una vida de fiestas y excesos.